Un buen abogado, alguien que entiende el proceso, no podría responder a esa pregunta la primera vez que se reúnen. Esto se debe a que el primer día, o la primera vez que un abogado y un cliente se reúnen, es extremadamente difícil entender el alcance de las lesiones y el tipo de daños que deben ser reembolsados al cliente.

Por lo tanto, un abogado que entienda el proceso debe ser capaz de explicar al cliente que cada caso es diferente. Las diferentes compañías de seguros compensan cada lesión de forma única.

En primer lugar, tenemos que averiguar cuáles son los daños y perjuicios. Tenemos que averiguar cuáles son los gastos médicos y la naturaleza de las lesiones médicas para poder tener una mejor comprensión de cuánto vale el caso.

La indemnización que se va a pagar al cliente varía. Las reclamaciones pueden estar relacionadas con las lesiones, el lucro cesante, la pérdida del disfrute de la vida y la pérdida de la capacidad de ganancia potencial.

Así que, aunque esa pregunta se hace con bastante frecuencia, si un abogado responde con una cifra concreta la primera vez que habla con él, debería sospechar cómo ha llegado a esa cifra tan rápidamente.