Después de haber estado en un accidente de coche, especialmente si es debido a la negligencia de otro conductor, uno de sus mayores activos en el futuro puede venir en la forma de un testigo. Si hay algún debate sobre lo que sucedió exactamente, en última instancia, hacer la pregunta de quién tuvo la culpa, puede ser muy beneficioso tener a alguien que estaba en la escena del accidente y vio lo que pasó.

Sin embargo, teniendo esto en cuenta, utilizar un testigo no siempre es tan sencillo como parece. Algunos testigos se consideran poco creíbles por diferentes razones, a menudo imprevistas. Si el testigo no se utiliza adecuadamente, puede acabar perjudicando sus posibilidades de éxito o de indemnización. Debido a que los testigos pueden ser un activo tan importante después de un accidente de coche, es importante entender todos los aspectos plenamente. Hay muchas preguntas comunes en torno a este tema.

¿Quién puede ser testigo de un accidente de tráfico?

Un testigo se define como cualquier persona que estaba en el lugar del accidente y que vio lo que pasó, excluyendo a los conductores de los vehículos y/o peatones involucrados en el accidente. Esto puede incluir a las personas de otros coches y a los peatones que no estuvieron directamente implicados en el accidente. En algunos casos, incluso los pasajeros de los coches implicados pueden ser utilizados como testigos, siempre que no actúen de forma sesgada y sean considerados creíbles. La idea general en torno a la definición de testigo es que se trata de una persona que ha observado lo ocurrido. La honestidad y la veracidad de un testigo es el punto en el que comienzan a trazarse los límites.

¿Cómo afecta la credibilidad de los testigos a la reclamación por accidente de tráfico?

Por muy imparcial que parezca un testigo, su testimonio sólo puede ser beneficioso si la persona es creíble. Hay muchos factores diferentes que afectan a la credibilidad. La primera pregunta que hay que hacerse es si el testigo conducía un coche, lo que significa que su atención habría estado en evitar el accidente. Por otro lado, si el testigo era un peatón cercano que observaba el accidente desde una distancia segura, puede haber sido capaz de asimilar mejor todos los detalles porque no estaba tomando decisiones importantes para sí mismo en el momento del accidente.

Otra cosa importante a tener en cuenta es si el accidente llamó o no la atención del testigo o si estuvieron observando de principio a fin. Si sólo miraron hacia allí porque oyeron el accidente, puede que no se les considere muy creíbles porque no vieron la totalidad del accidente.

¿Tuvo el testigo tiempo para observar los coches durante un periodo suficiente para determinar quién estaba siendo negligente? Por ejemplo, ¿podría decir si uno de los coches iba a gran velocidad? Dirigir su atención en ese sentido inmediatamente antes del accidente puede no proporcionar este tipo de información.

¿Estaba el testigo distraído? ¿Tenía niños en el vehículo de los que ocuparse? Este tipo de cosas también pueden afectar a lo que el testigo fue capaz de asimilar y recordar con precisión.

Hay muchas otras cosas que entran en juego a la hora de determinar la credibilidad, como el carácter y la condición física del testigo. ¿Es un delincuente condenado? ¿Tiene el testigo mala vista o audición? ¿Estaba el testigo intoxicado? Todos estos tipos de preguntas se harán al determinar la credibilidad de un testigo durante un caso. Si un testigo no se considera creíble, no podrá ayudar o dificultar sus posibilidades de recibir una indemnización.

¿Cómo se interroga a un testigo de un accidente de tráfico?

Cuando se interrogue a los testigos sobre el accidente que vieron, se les harán muchas preguntas. Deberán ser capaces de proporcionar detalles muy específicos que los conductores no habrían podido ver desde su punto de vista. Hay una lista estándar de preguntas para los testigos que incluyen:

  • ¿Dónde estaban parados?
  • ¿Qué parte de la escena pudieron ver realmente?
  • ¿En qué dirección se dirigían en el momento del accidente?
  • ¿Qué anomalías observó el testigo antes, durante y después del accidente?
  • ¿Cuándo se dieron cuenta del accidente?
  • ¿Tenían una visión clara o había algún tipo de obstrucción?

También se le pedirá al testigo que describa todo el suceso en detalle, así como que responda a muchas otras preguntas. Las respuestas a estas preguntas pueden ser muy importantes y beneficiosas para el resultado del caso. Si tiene la oportunidad de utilizar un testigo creíble, debería hacerlo.

Si tiene más preguntas sobre los testigos, cómo utilizarlos o cualquier otra cosa, no dude en ponerse en contacto con un abogado de accidentes de tráfico del bufete Drake.